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jueves, 4 de noviembre de 2010

Alejandro Piscitelli



Lic. Alejandro Piscitelli
Filósofo de las ciberculturas

Biografía
Alejandro Piscitelli es licenciado en Filosofía en la Universidad de Buenos Aires y ha obtenido Masters en Ciencias de Sistemas en la Universidad de Louisville (Estados Unidos) y la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).
Es consultor organizacional en Internet y e-commerce.
Se desempeña como Profesor Titular del Taller de Procesamiento de Datos, Telemática e Informática, UBA.
Además, es docente de cursos de post-grado en la UBA, FLACSO, Universidad de San Andrés, y universidades nacionales y latinoamericanas.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

El hipertexto y la polifonía del sentido

"Hipertexto". Se trata de una de las palabras más maltratadas de los últimos años: durante mucho tiempo funcionó como un comodín, como un término plausibler en el momento de conectar las nuevas tecnologías de la información con las humanidades y la educación. También se ha utilizado simplemente para referirse a textos digitalizados o a aquellos que, aun impresos, tienen una estructura no lineal. Lo cierto es que, en su origen, el hipertexto le dio nombre a una idea, es decir, a un sistema que pudiera resolver dos problemáticas: un sistema automático de organización de la información, por un lado, y un afán enciclopédico e integrador de todas las redes de conocimiento, por el otro.

Hoy, el hipertexto podría caracterizarse con justicia al decir que se trata de una estructura de base informática que hace posible, a través de enlaces, la conexión electrónica de unidades textuales (dentro del texto o con otros documentos) y que requiere de la manipulación activa del lector (véase Pajares Tosca, 2003). Esta definición parece lograr una síntesis interesante entre la idea de hipertexto como categoría genérica-textual de base informática y de hipertexto como producto concreto de una tecnología. En efecto, lo que nos interesa particxularmente en esta obra es que se trata del formato con el cual se presenta la información en Internet. En este sentido, el espacio que la lectura y la escritura en pantalla han ganado en el último tiempo revelan, a fin de cuentas, el lento ascenso del hipertexto como nuevo medio de producción del conocimiento.

El hipertexto es el nuevo actor en un mundo donde ha imperado, hasta hace muy poco, el formato libro y es por eso que en esta obra indagaremos ciertamente sobre lo que implica esa transformación. En rigor, nos interesa reflexionar sobre si el hipertexto libera realmente de la pesadez del códice textual y sobre la medida en que logra articular mejor que cualquier otro medio las ventajas de la presentación de la información (incorporando todos los formatos y soportes preexistentes). Sin embargo, interesa pensar aquí, muy particularmente, si el hipertexto fragmenta o profundiza las formas de socialización del conocimiento de que dispusimos hasta ahora (...)

Entonces, ¿qué clase de insuficiencia viene a salvar el hipertexto? Recordemos aquí al filósofo austríaco Ludwig Wittgenstein, el cual se encontró, en el inicio de su obra más importante, Investigaciones filosóficas, con un formidable problema de construcción: había estado durante mucho tiempo anotando una serie de pensamientos en párrafos cortos e inconexos, para agruparlos luego en cadenas largas, dedicadas a temas semejantes. Hábía utilizado este método porque le preocupaba especialmente que los pensamientos avanzaran de un tema a otro en un orden natural y sin interrupciones. Percibía que sus pensamientos se paralizaban cuando intentaba forzarlos en una dirección única, ya que la investigación en la que estaba embarcado lo forzaba a viajar por un amplio campo de pensamientos entrecruzados, pensamientos dispersos que buscaban puntos de tangencia (...)

En efecto, el problema con el que se encontró Wittgenstein y que muchos otros revisaron es: ¿cómo representar el pensamiento de una manera más similar al modo en que surge? Parece claro que la forma libro, así como lo conocemos, no lo permite. En ese sentido, cabría preguntarse si no debemos extender el cuestionamiento a la palabra, a la escritura como medio de representación privilegiado y monopólico, tal como lo comentábamos al principio de esta introducción.

El hipertexto-o navegación no secuencial de la información, en sentido estricto- es la solución a una pregunta no formulada, al menos no explícitamente, por la cultura hegemónica del papel y de sus instrumentos de perpetuación.

("Internet, la Imprenta del Siglo XXI", Alejandro Piscitelli)

martes, 2 de noviembre de 2010

La Sala de Computación


Las TIC'S se están convirtiendo de manera vertiginosa en una herramienta valiosa, entretenida y dinámica para desarrollar competencias investigativas a través de las posibilidades múltiples que ofrecen las tecnologías comunicacionales e informáticas.
Es muy probable que, incluso en los espacios públicos, donde estudian la mayoría de nuestros niños y jóvenes más vulnerables, a futuro los Laboratorios Móviles se establezcan definitivamente en todos los cursos. Y cada educando pueda trabajar con su computador portátil, ¿será la retirada de los lápices? Posiblemente no sea tan drástico, pues aún existen libros aunque hace mucho tiempo se decía que con el cine o la TV iba a desaparecer la lectura de libros. Lo más probable es que estas tecnologías se mantengan a la par de las demás; sólo que ahora se expande el espectro de probabilidades informacionales y es posible construir nuevas formas de crear, de comunicarse y de investigar. Para algunos ya existe una suerte de "infoxicación" en la red, pero también debe haber pasado algo similar desde los inicios de la imprenta hasta el inmenso nivel de producción editorial de nuestro siglo XXI.
Lo cierto es que pareciera un destino ineluctable en la educación el imperativo de alfabetizarse digitalmente. Tanto para los docentes como para los padres y apoderados, que van a la saga de los propios niños y jóvenes, alertas desde que habitan entre el líquido amnéotico a las vibraciones luminosas que destellan las pantallas de los computadores. Efectivamente ellos van a la vanguardia, les es tan natural rodar por los teclados del mismo modo que apoderarse de los juegos y sus vaivenes, de las claves y laberintos múltiples que comporta este entramado tecnológico.
El gran desafío para la Escuela es poder seguir siendo un espacio de aprendizaje de aquellos saberes necesarios a nivel cognitivo así como a nivel socioafectivo, sirviéndose de todas las herramientas y tecnologías que ha creado la humanidad, desde el propio lenguaje, escritura, hasta hoy día la promesa de utilizar de manera innovadora las TIC'S.

Editorial Escolar

El Proyecto de generar una Editorial Escolar en el espacio educativo donde me desenvuelvo tiene la particularidad de ser elaborado sobre la base de los productos textuales que elaboren los estudiantes en un Taller de Comprensión Lectora y Producción de Textos. En efecto, los jóvenes además de leer comprensivamente las lecturas seleccionadas por su profesor-guía, van a distinguir distintas tipologías textuales y de acuerdo a los formatos que más les acomoden irán generando textos diversos. Es así que redactarán recetarios de cocina, textos publicitarios, crónicas, entrevistas, breves ensayos, poemas, cuentos, etc.
En forma paralela, ellos aprenderán en un Taller de Encuadernación y Diseño que les otorgará un especialista, a diseñar el libro que elaborarán como producto final.
El profesor guía creará junto a sus alumnos un weblog con la finalidad de que éste sea el espacio acordado de complicidades creativas tanto para comunicarse interactivamente, así como para instalar temas de discusión y/o análisis interpretativo de los textos que van leyendo.
Este taller se hará preferentemente en la sala tecnológica donde hay computadores y proyectora multimedial. Esto les permitirá a los jóvenes navegar por Internet para ir investigando distintas propuestas, datos, informaciones para ir archivándolas.
La creación de esta Editorial Escolar, se prevé, permitirá estimular el autoestima de los estudiantes toda vez que se sentirán capaces de crear textos propios para su posterior edición con formato de libro. Aparte de ello, la idea es que mejoren su comprensión lectora a través de un trabajo colaborativo de lectura coparticipativa y de retroalimentación de la producción textual.